En 2011, Sultan Kösen ingresó en el Libro Guinness de los Récords como la «persona viva más alta del Mundo». Desde entonces ha mantenido este récord de manera indiscutible. El tiene una altura de 2,51 m. La altura media de los hombres en muchos países de Europa es de 1,75 m y en Latinoamérica 1 70 m. 

Su historia.

Sultan Kösen nació el 10 de diciembre de 1982 en el sureste de Anatolia, una región de Turquía. Por lo tanto, Sultan tiene 39 años hoy. Su infancia fue normal al principio. Todo cambió para Sultan cuando tenía nueve años. Mientras que sus hermanos tenían una altura «normal» y, sobre todo, crecían lentamente, el fué simpre el más alto, ya que tuvo un crecimiento acelerado extremo.

Incluso si tiene un récord mundial por su altura y se convirtió en una celebridad, una altura tan gigantesca también tiene enormes desventajas. Los otros niños se burlaban de él por eso en la escuela, pero a medida que crecía se le hacía cada vez más difícil (y para sus huesos) soportar su propio peso.

Tiene algunas limitaciones físicas, pero también ha tenido que renunciar a muchos de los deseos de su corazón. Por ejemplo, el hombre de 39 años nunca podrá obtener una licencia de conducir porque no cabe en un automóvil.

Durante mucho tiempo, los padres de Sultan no sabían de dónde procedía el enorme crecimiento de su hijo. No tenían los medios económicos para que un experto revisara a su hijo. Fue solo muchos años después que los médicos descubrieron la verdadera razón. Tiene acromegalia. La acromegalia ocurre cuando el cuerpo produce demasiada hormona del crecimiento.

La causa más común de sobreproducción de la hormona del crecimiento es un tumor benigno de la glándula pituitaria, que se encuentra debajo del cerebro. Si esto sucede antes de la pubertad, como sucede con Sultan, puede conducir a un «crecimiento gigantesco». Sultan Kösen no solo rompe un récord mundial con su altura de 2,51 m. Con una longitud de 28,5 cm, sus manos son también las manos más grandes del mundo.

De hecho…

• el hombre más alto de la historia del que se tienen pruebas fue Robert Pershing Wadlow, el cual murió en 1940, pero llegó a medir nada más y nada menos que 2,72 metros de altura.
• Todos los hombres que han ostentado el título de más altos del mundo han tenido alguna enfermedad asociada que los ha puesto en esa condición.
• Encontrar zapatos ha sido siempre la mayor dificultad de un hombre de gran altura, mucho más que encontrar la ropa adecuada.